La Ley CARES supuso un cambio potencial tanto para los trabajadores como para las empresas. Por primera vez, las empresas podían ayudar a sus empleados a pagar sus préstamos estudiantiles mediante contribuciones libres de impuestos.
A partir de diciembre de 2020, esta legislación se ha prorrogado cinco años. Los empleadores tendrán la oportunidad de ofrecer a sus empleados esta prestación que puede cambiarles la vida al menos hasta diciembre de 2025. En las circunstancias adecuadas, esta prestación podría tener una enorme repercusión en la situación financiera, la planificación de la vida y la satisfacción laboral y el rendimiento generales de sus empleados.
Esta prestación también puede ser una bendición para los empresarios, ya que les permite atraer y retener talento, diversificar su reserva de talentos y ofrecer una nueva forma innovadora de apoyar el bienestar financiero y mental de sus empleados.
En resumen, la ayuda para préstamos estudiantiles patrocinada por el empleador es una solución ventajosa para las empresas y sus empleados, y podría representar el futuro de la oferta de prestaciones.
Entremos en materia. ¿Cómo funciona esta prestación?
Lo bueno de esta nueva prestación es que es bastante sencilla de implantar para el empresario, pero tiene un gran impacto para cada empleado con préstamos.
Las empresas pueden contribuir hasta con 5250 $ anuales libres de impuestos a los pagos de los préstamos estudiantiles de los empleados, lo que equivale a unos 437 $ al mes. Teniendo en cuenta que el pago medio de un préstamo estudiantil es de 393 $, esto podría duplicar el pago mensual de su empleado. Incluso contribuir con una parte de esta cantidad total ayuda: unos 50 o 100 dólares extra cada mes pueden acelerar realmente el proceso de reembolso. (Hablaremos más sobre esto más adelante).
Además, cualquier préstamo considerado "préstamo educativo cualificado" por el IRS es elegible, independientemente de si son privados o federales.
¿Por qué deberían los empresarios plantearse la implantación de esta prestación?
Este beneficio puede mejorar significativamente la satisfacción laboral general de sus empleados, la cultura de la empresa y la capacidad de crear y retener un equipo comprometido y realizado. He aquí cinco ventajas clave de ofrecer ayudas para préstamos estudiantiles patrocinadas por los empleados.
1. Adapte sus prestaciones al mundo del trabajador a distancia
La pandemia trastornó casi todos los elementos de la vida cotidiana, pero especialmente la vida y las expectativas laborales. Muchos lugares de trabajo que empezaron el año en la oficina se vieron obligados a cambiar rápidamente a una configuración totalmente remota.
Un año después, muchos empleados afirman que prefieren trabajar a distancia y quieren tener la opción de trabajar desde casa a perpetuidad. Pero esto significa que las ventajas que antes atraían a los empleados de la oficina ya no tendrán el mismo atractivo.
¿Almuerzos y meriendas gratis? ¿Beneficios de transporte? Esas ofertas no significarán gran cosa para un trabajador a domicilio. ¿Pero financiación adicional para sus préstamos? Eso sí que tiene impacto, esté donde esté.
2. Atraer y retener a los mejores talentos
Una ventaja competitiva. Esta innovadora prestación se perfila como uno de los programas de asistencia al empleado más demandados en el lugar de trabajo moderno. Además, es más probable que los empleados permanezcan más tiempo en su puesto de trabajo si se les ofrece esta ayuda.
Y aunque esta prestación es todavía relativamente nueva, su popularidad está creciendo rápidamente y pronto podría convertirse en la norma. De hecho, la Society for Human Resource Management ha pronosticado que uno de cada tres empresarios podría ofrecer pronto esta prestación.
3. Apoye la salud mental y el bienestar de sus empleados
La salud mental es un tema prioritario para los profesionales de RRHH en 2021, y con razón. Afecta a todos los aspectos de la vida, incluida la capacidad de rendir bien en el trabajo. La falta de apoyo a la salud mental puede conducir a una baja moral, una reducción de la productividad y un aumento de la rotación de empleados.
No es descabellado afirmar que gestionar cuidadosamente los préstamos estudiantiles puede ser una forma de cuidar la salud mental. La investigación ha demostrado una clara conexión entre la salud mental y los préstamos estudiantiles. Según un informe de 2018 que elaboramos en colaboración con Student Debt Crisis, el 86 % de los encuestados afirmó que la deuda estudiantil es una fuente importante de estrés. De esos encuestados, uno de cada tres dijo que es su mayor fuente de estrés.
La implantación de esta prestación pone de manifiesto la empatía y el compromiso de su empresa con la creación de un entorno saludable y solidario para sus empleados.
4. Demuestre su compromiso con la diversidad, la equidad y la inclusión
La deuda estudiantil afecta de forma desproporcionada a los grupos marginados de tu base de empleados. Las mujeres tienen la ⅔ de toda la deuda estudiantil. Los negros, los indígenas y las personas de color tienen más deuda, son sistemáticamente más propensos al impago y, debido a la intersección de la brecha de riqueza racial, mantienen su deuda durante períodos más largos cobrando mayores cantidades de intereses.
Comprometerse a conceder ayudas para préstamos estudiantiles ayuda a derribar estas barreras sistémicas, ofreciendo a los empresarios una forma única de llevar sus iniciativas de DEI un paso más allá y actuar de acuerdo con su compromiso de crear una mano de obra más equitativa.
5. Ayude a sus empleados a planificar su futuro
Los préstamos para estudios pueden ser un obstáculo importante para alcanzar la libertad financiera. Esto ha llevado a muchos prestatarios a retrasar objetivos vitales importantes, como ahorrar para la jubilación o comprar una casa. Al dar a tus empleados el apoyo que necesitan para pagar sus préstamos, también les estás ofreciendo la estabilidad que necesitan para planificar su vida.
¿Cuál es la eficacia de esta prestación?
Ese apoyo adicional puede aumentar significativamente la velocidad y la facilidad con que sus empleados son capaces de pagar sus préstamos.
Como ejemplo, te presentaremos a dos prestatarios, Sam y Sasha. Cada uno de ellos tiene un saldo pendiente de unos 40.000 dólares, con un tipo de interés del 9,00%. Según las condiciones de sus préstamos, ambos esperan amortizarlos en un periodo de veinte años.
El empleador de Sasha ofrece la prestación de ayuda para préstamos estudiantiles y contribuye con 100 dólares al mes. Con los $100 adicionales añadidos a su propio pago mensual, Sasha estará en camino de pagar sus préstamos en 12 años. Has leído bien: la contribución de 100 dólares de su empresa le ha ayudado a reducir en ocho años el ciclo de vida total de su préstamo.
Mientras tanto, Sam seguirá pagando cada mes durante los próximos veinte años. Esto le deja con menos efectivo para destinar a sus objetivos a largo plazo, menos estabilidad financiera y menos previsión para su futura carrera.
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